¡Buenas, Nuditos!! Otra vez es lunes, ¡noooooo! Con lo bien que se vive de fin de semana...
Pero no pasa nada, nos enredamos un poco y se nos pasa el mal rato.
Lo que os traigo hoy como veis es un bolso étnico, pero que tiene una peculiaridad: ¡está hecho con una alfombra! Sí, sí, como lo oís. De hecho es una alfombra mangada, a mi madre...
...esta en concreto. Os cuento más o menos la conversación:
- Ama, ¿te puedo mangar una alfombra?
- ¿Cuál?
- La azul de tu cuarto.
- ¿Para qué?
- Para hacerme un bolso (mi madre me mira con cara de póker, peeero...)
- No, esa no, la roja si quieres...
- ¿Cuál?
- La del pasillo (aquí salgo corriendo para buscarla, y...)
- ¡Vale!
Y ahí lo dejamos, yo encantada con mi nuevo hallazgo y mi madre mirándome como pensando 'mi hija está más tarada de lo que pensaba'
Tardé algunas semanas en cogerla (lo de ponerme a coser una cosa de lana con el calorcito como que no me apetecía...), pero una vez lavada, a trabajar que me puse:
Así como referencia os cuento que las medidas de la alfombra eran 92 x 59 cm, o sea, que me iba a salir un buen bolso... Como ya os he dicho, era de lana, traída por mis padres de algún viaje, un poco gruesa, pero no tanto como para tener problemas a la hora de coserla con la máquina (ojo, esto hay que tenerlos muuuuy en cuenta)
Todo bolso necesita asas y las mías... ¡pues están hechas con cinturones! 😳. Los tenía por casa, los había comprado en rebajas en una de las tiendas del tito Amancio para otro bolso que iba a hacer, pero resulta que al final me encajaron más con este. Pero bueno, que tampoco hace falta que vosotr@s hagáis lo mismo; de hecho existen unas tiendas llamadas mercerías donde venden un montón de cosas muy válidas...
Volvamos al bolso... Lo primero es juntar derecho con derecho y coser los extremos. Abrimos costura con la plancha y pespunteamos el pico en la parte baja, consiguiendo así darle una base al bolso.
Lo que hacemos ahora es precisamente fijar ese pico a la parte baja del bolso: con hilo de tipo torzal (el de los vaqueros para los mortales), hacemos varias puntadas pasando la aguja de un lado al otro; coloqué un botón en la parte de fuera para disimular la puntada, pero bueno, que es opcional...
'Zigzagueaos' la boca del bolso y recortamos justo al ras eliminando los flecos. Es la única parte que recorté de la alfombra, el resto lo aproveché al máximo (así de enorme me quedó...), pero que si algún día me aburro de él y lo desmonto, coso en los extremos algún biés y vuelvo a tener alfombra (si se la devolvería a la Reina o no, es ya otro asunto... 😈)
Nos ponemos con el forro, que a quien no le apetezca, pues tampoco tiene que hacerlo. De hecho yo lo decidí sobre la marcha, porque me parece que con él las cosas quedan mucho mas txukuna (ordenado, curioso...) Si lo hacéis sin forro, el bolso quedará bien seguro, aunque probablemente echaréis de menos algún bolsillo...
Pues eso, se recorta un rectángulo con las medidas del bolso (aunque si lo hacemos un poco más pequeño mejor)
Como me ocurrió en el bolso de Juls, volví a quedarme sin tela para bolsillos. Pero no fue un gran drama porque con unos empalmes de los trozos que tenía, me dieron para un par muy majos: uno para el móvil, tarjeta del bus... y otro para todo el mogollón de llaves que llevo encima habitualmente.
Planchamos a 1 cm los extremos y luego a 2 y 2 la boca del bolsillo, y la pespunteamos ¿Los tenéis? Pues los colocamos en el forro, centrándolos. Pespunte al canto, otro al ancho de patilla (tendréis que echarle imaginación porque me estoy dando cuenta de que en las fotos no se ve ni leches 😁) y...
...cosemos los costados, y hacemos un pico como en la parte exterior.
Juntamos ambos y les damos unas puntadas, lo justo para asegurarnos de que no nos llevaremos el forro con nosotros cada vez que saquemos algo.
Giramos el asunto y cosemos la boca del bolso.
Para los fugados con el tema forro, es el momento de volver, porque vamos a coser un grosgrain (lazo con rayitas) de adorno; con una cinta de plasticuero quedaría muy bien también, ¡y con una de cuero ya ni os cuento!
Lo sujetamos con alfileres al borde, cosemos, giramos, volvemos a sujetarlo con los alfileres y pespunteamos por las parte de fuera, al ras del lazo (como era un poco más estrecho de lo que me hubiera gustado, pues se me escapó en algún punto, pero bueno, se cierra a mano y listo... y como queda en la parte interior, tampoco es que lo vaya a ver nadie ✌😎)
Vamos a poner las asas ahora: si tenéis como yo unos estupendísimos cinturones, lo primero es recortarlos, y ahora sí, ¡a coser! Dependiendo del grosor, pues nos costará más o menos, por eso, dar con unos ya perforados como los míos sería lo ideal, esfuerzo extra que os ahorráis... ¡Y pinchazos en los dedos seguro que también! Sea cual sea vuestra elección, lo que si que tenéis que tener en cuenta es que llevaremos peso, por lo que hilo de torzal y muchas puntadas en diferentes sitios es lo más recomendable.
Como último paso, pellizcamos los extremos superiores (mantenemos el ancho de la base), le damos unas puntadas y...
...¡bolso terminado!!
Si es que soy como un hada madrina: de alfombra a bolso en un ¡Zas! (bueno, y unas cuantas horas de trabajo...)
Y después de una semana usándolo, os digo que es una verdadera gozada; anda que no voy contenta yo con mi bolso, lleno hasta los topes (como diría Juls: '¡eso, que se note que eres vasca!'; efectivamente, yo no levanto piedras, yo levanto bolsos) y lo que me divierto con las caras de la gente cuando les digo con qué está hecho...
Y si así en cuadrado os parece como muy grandote, con que introduzcáis los extremos dándole una forma más triangular, ya no os lo parecerá tanto.
Cuando aparecí con él en casa de mi madre, me dijo: '¡Lo has hecho!, qué bonito... ¡estás como un cencerro! (parece que pensaba que estaba de coña...) El primer día que lo lleve a la ofi, mi Compi Vecina de Mesa me preguntó directamente si me mudaba 😂, pero luego le solté lo de la alfombra y la dejé pasmada, creo; lo que piensa seguro es que estoy como una cabra...
Pues eso, Nuditos, choriceando alfombras os quiero ver... o cojines, salvamanteles... cualquier cosa es buena para hacerse un bolso tipo shopper como este, pero, ¡nada de confesar quién ha sido la que os ha dado la idea! Je, je
Ya me enseñaréis vuestras obras...
Mientras, ¡sed buenos!