miércoles, 24 de junio de 2015

WITHOUT THIMBLE: TOP VOLANTES NIÑA


  ¡Buenas, he vuelto! Y hoy sí, con un post de costura, que después de todo es lo mío. Eso sí, lo primero que voy a hacer es explicar por qué el apartado de costura se llama Without Thimble:
  El caso es que nunca, nunca, nunca uso dedal; mi súper abuela me recuerda siempre que puede: 'Costurera sin dedal, cose poco y cose mal', pero yo, como quien oye llover... También mis profas de Alta Costura intentaron que me lo pusiera, pero nada, no hubo suerte, jeje! Y eso que a veces dependiendo del tejido, llego a destrozarme los dedos... Más ni por esas cedo: no lo soporto, me da calor y me agobia.
  Y dicho esto, nos metemos en materia.
  El año pasado (o el anterior, no sé...), mi prima tuvo un momento creativo: se metió en el mundo de la costura y hasta se compró una máquina de coser... y después de unos cuantos proyectos la locura se le pasó, y las telas terminaron en mi casa.
  

  Entre los diferentes retales, se encontraba esta tela de flores azules tan mona (y pija, para qué lo vamos a negar...). Tenía claro que iba a confeccionar algo para la Princesa, después de todo su madre pensaba hacerle un vestido con ella (o eso creo), pero qué, eso no lo tenía claro. Con la llegada del verano mi mente se iluminó: voy a hacerle un top fresquito.
  Para mitigar un poco el 'pijerío' decidí hacer algo muy mío: mezclar estampados. A ver, me gusta mezclarlos pero con sentido... o eso me parece a mí. ¿Os parece que un jersey marinero y un fular de flores pegan? Yo la verdad es que voy súper contenta...
  Bueno, ¡que me pierdo! Como decía, encontré entre mis telas un retalito con un estampado de flores que me pareció que le daría un contraste bonito.
  Con los materiales definidos, toca ponerse en marcha:
Paso 1, los patrones:
  Como quería un diseño sin mucha complicación, dibujé un patrón base y luego le hice un par de transformaciones. Rápido y sencillo, ¡bien!
Paso 2, el corte
  A la hora de cortar una pieza, es importante que se tenga en cuenta el hilo de la tela: todos los patrones se cortan en este sentido, salvo que quiera hacerse a contrahilo (90º) o al biés (45º). Vamos a ver, que se puede hacer también a tu bola, pero si luego la prenda queda mal, no será de casualidad...
  

  Lo que son el delantero, la espalda y los volantes los corté en el género de flores azul, los hombros, en la tela amarilla, y para hacer las vistas, elegí una tela blanca de algodón. Normalmente las vistas se realizan también con el tejido principal, pero en este caso, como las florecitas azules se veían también por el revés de la tela, me pareció que así quedaría más limpio.


 Paso 3, la confección:
Lo primero, remallar los costados y la espalda; es decir, las costuras que pueden verse. A continuación, coser los hombros de la vista; esto se puede hacer más tarde, pero yo prefiero tenerlo preparado ya...


  Cosemos ahora los hombros al delantero y a la espalda; se plancha abriendo las costuras y ya lo tenemos listo. Como veis, estas partes no están remalladas, ya que la vista las va a tapar cuando la prenda esté terminada.


  Es el turno de los volantes, los que darán realmente la gracia a esta prenda. Puede parecer complicado, pero hay una manera muy fácil de fruncirlos: se hace una puntada grande con la máquina, sin ningún remate, pero dejando una hebra larga. Sujetando la pieza con una de las manos, con la otra tiramos de una de las hebras y veremos que se va frunciendo; solo queda distribuir bien los frunces en el largo deseado, o sea, lo que mide la sisa (me estoy acordando de cuando en clase hacíamos los frunces con la máquina directamente sobre la tela... Cuantas cosas hago ahora que la profa no nos dejaba hacer, ¡como usar alfileres! Soy malvada...)
  Cosemos cada volante en su sisa correspondiente, y seguimos.


  Toca ahora hacer la parte que menos me gusta: poner las vistas... que luego quedan muy bien, ¡pero es un rollo!
  Cosemos primero las sisas, con cuidado de no enroscar la prenda cuando pasemos de la primera a la segunda, que si no toca descoser, y el escote a continuación (es un poco complicado, pero con paciencia se hace). Importantísimo vaciar las costuras; es decir, recortar la tela que no nos hace falta  de la costura. De no hacerlo, en las zonas de curva como las sisas o el escote por ejemplo, la prenda coge una forma rarísima y sienta mal.
  Cosemos ahora los costados, empezando por el género, y siguiendo por la vista, todo en una costura continua; ¡esto ya parece algo!
  Con la prenda del derecho, antes de pasarle la plancha, suelo dar un pespunte al canto en algunas zonas de la prenda, siempre por la parte de la vista, para asegurarme de que esta queda oculta.


  Remallamos el bajo de la vista. A continuación, cosemos la espalda: primero vista con género hasta unos 4 cm del bajo de la vista. Giramos la prenda y cosemos, vista con vista el trocito que queda, y  luego género con género (que esto explicado así igual es un poco lío... Mmm, es un buen tema para un tutorial...)
  Redoblamos el bajo, lo planchamos y lo cosemos como parte final de la confección pura y dura.


  Solo queda ya los acabados finales: fijar las vistas a las conturas para que no se levanten, cortar todos los hilos que cuelgan (yo no los corto hasta el final, así que imaginaros...), coser el botón y hacer el pasador.
  Un poco de plancha...


...¡y prenda acabada! Bonita, ¿eh?

  Y después de todo este rollo, una reflexión: qué complicado es esto de escribir el making of de una prenda... Qué igual es solo porque ha sido la primera vez que lo hago, pero agotada me he quedado...  Voy a tomarme un merecido descanso.
  ¡Nos vemos!
                                                                           M..


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