Sí Nuditos, esa elementa vestida de verde soy yo, ¿no tengo una pinta Asquerosa??? Teniendo en cuenta que este personaje es un brócoli, ¡creo que estoy estupenda!
Aunque un poco de trampa he hecho, porque la cara no me la pinté... (maravillas del editor de fotos) Es que hubo fallo técnico: resulta que miré el tema de la pintura cuando decidimos los disfraces, pero me dije '¡va, hay tiempo!'... y luego ya no había. Tampoco es que me importara mucho, lo de llevar un pegote en la cara no me apasiona especialmente. Pero aunque ni la Princesa ni yo llevábamos la cara pintada de nuestro color, si que nos maquillamos con unos polvos nacarados, así que mirándonos de cerca, algo brillábamos... ✌😎
A la hora de hacer el disfraz, tuve también algún problemilla... pero esto ya lo veréis más adelante.
En la imagen no se aprecia, pero la tela era gordita, con base de espuma para no pasar frío, como os comenté en el post de Alegría; también era muuuuy brillante, como las emociones en la peli. ¡Ay, qué a gustito que iba a ir estos carnavales...!
Para ahorrar tiempo, eché mano de patrones antiguos, el de la chaqueta de la Reina de Corazones, que además me quedaba estupenda, oye.
La mecánica, pues la misma de siempre: se cosen los costadillos de delantero y espalda, y luego los hombros (que igual no lo hice en ese orden, pero tampoco pasa nada)
Se hace a continuación el puño, en el que usé otra tela para el interior, para que quedara guays si la doblaba... Se cosen derecho con derecho, se hacen los piquetes, se gira y se cosen a la boca-manga.
Y colocamos ahora la manga, con cariño... Cosemos los extremos, seguimos por los costados...
...y ya tenemos una chaqueta. Hasta aquí todo bien, ahora empieza la fiesta...
La primera idea fue aprovechar el ancho de la tela para fruncir luego la falda en la cintura, por eso igualé primero el largo del total de la tela que me quedaba. La sujeté después con los alfileres y la cosí... Y el resultado fue un abrigo tipo Balenciaga pero en cutre; vamos, que el volumen no lucía nada. Me frustré tanto que ni le saqué foto, así que os toca echar mano de vuestra imaginación...
Descartado el primer plan, pasé al segundo: hacer la falda con palas, dándole así un efecto evasé. Como tenía a mano la que hice para decorar la falda de la Reina de Corazones (aprovechamiento, aprovechamiento...), pues esa que usé, claro que tuve que aumentar un poco tanto el largo como el ancho para que encajara con la chaqueta.
Las cosí unas a otras, las uní al cuerpo, me la probé, y cuando me vi en el espejo dije 'Leches, parezco un guardia de la Ciudad Esmeralda!' ¡Mierda, mierda, mierda!
Evidentemente abandoné el asunto, porque tenía pinta de que iba a terminar mal...
Las cosí unas a otras, las uní al cuerpo, me la probé, y cuando me vi en el espejo dije 'Leches, parezco un guardia de la Ciudad Esmeralda!' ¡Mierda, mierda, mierda!
Evidentemente abandoné el asunto, porque tenía pinta de que iba a terminar mal...
...Al día siguiente, más centrada, decidí cortar por lo sano, o sea, literal: corté la falda para quedarme únicamente con una chaqueta (que asaltase el armario de mi madre y encontrase allí un vestido verde que me encajaba a la perfección tuvo mucho que ver en la toma de la decisión... Por cierto, que también le mangué los guantes, jeje... ¡Gracias ama!)
Pues eso, cosemos la cremallera a la chaqueta, con una primera costura para mantenerla en su sitio, y luego ya otra más pegada al extremo.
Doblamos y pespunteamos el bajo con una puntada bonita...
...y le colocamos la vista, cortada en la misma tela de los puños. Se cose, se piquetea, se gira, se cose al canto y por último se le da una puntada de adorno, que evitará también que se mueva de su sitio.
Solo queda ya hacer el pañuelo, que apañé con unos restos de cuando me hice la capa para el disfraz de Anna la de Frozen (no sé ni cuanto hace de esto...)
Pues ya está, ya tenemos el look... ¡O casi! porque...
¡Falta la peluca! Ponerse a hacer esto fue uno poco locura (¡sobre todo teniendo en cuenta que todo lo que tocaba me lo iba cargando sobre la marcha!), pero como no encontré una de un color que no fuera estridente, no me quedó otra.
Enredé un poco por internet y esta en a la conclusión que legué: hay que cortar mechones de lana e ir colocándolos en una peluca base en varias veces. Y esto es lo que hice. Medí el largo, cogí una tabla que me encajaba, y a darle vueltas con el ovillo. Cuando tenía una cantidad de lana considerable la cortaba por los extremos, y teniendo en cuenta donde estaba el centro, lo colocaba sobre la base y lo cosía con la máquina. Y así una y otra vez, hasta que no queden calvas... Y si se veía algún mechón chillón de esos, pues tijeretazo que le metía, y tan ancha me quedaba.
Lo de la trenza se me ocurrió sobre la marcha, para controlar un poco el asunto, que así con la tontería tenía un buen pelucón, y de paso tapaba un poco el orillo.
Pasamos por peluquería para igualar el largo...
...¡Y ya tenemos peluca!
Al tener la raya a un lado, pues en el contrario algunos pelos quedaron un poco cortos, pero vamos, que creo que quedó bastante bien (en nada me hago profesional...)
Pues ya está, tenía todo el kit para disfrazarme de Asco.
El sábado de carnaval cogí todos los bártulos, me fui a casa de mis primas, nos disfrazamos...
...y así de monísimas que salimos a la calle. Otro fallo técnico hizo que no nos sacásemos una foto de todos los personajes juntos, ¡ya nos vale! Pero es evidente que Miedo, Alegría y Asco estábamos estupendos! (veeeenga, vaaaale, Ira y Tristeza también estaban genial!)
Y con esto me despido Nuditos, voy a ver en qué lío puedo meterme ahora...
¡Nos vemos!
estas loca, hasta la peluca! el personaje te va clavado...jijijiji
ResponderEliminarA ti tampoco te pega nada, que va... 😈
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